Un día deja de ser igual que los otros, gracias al movimiento de un balón que mantiene dominando los pasos de unos jugadores que comenzaron a debatir una copa que los situé como los mejores jugadores de fútbol en el mundo.
El inicio de la copa mundial de fútbol en Sudáfrica en donde su población sobrevive con un poco más de un dólar diario mantendrá la concentración del mundo en los partidos que se disputan las naciones mundiales, en medio de un terrible desastre ecológico que ya está cobrando la vida natural del medio ambiente en el golfo de México o el reciente ataque que sufrió una flota en el mediterráneo. Pero los eventos que arriesgan la existencia de la humanidad pasan a segundo plano y la droga del fútbol mundialista comienza a surtir efecto entre los animales pensantes.
El comienzo del olvido se debate en Sudáfrica, mientras las especies vivas del planeta tierra sobreviven el revés que da el mundo en torno a un balón.